El Mecanismo de Ajuste en Frontera por Carbono: La Nueva Barrera Ambiental de la Unión Europea
A partir de octubre, la Unión Europea (UE) implementará el Mecanismo de Ajuste en Frontera por Carbono (CBAM), una herramienta ambiental con implicaciones proteccionistas para las importaciones en la región, especialmente aquellas provenientes de países en desarrollo.
El CBAM y sus Implicaciones
La UE ha notificado a la Organización Mundial de Comercio sobre el inicio de este mecanismo, aunque algunas excepciones entrarán en vigor más adelante, en diciembre del próximo año y enero de 2026. A partir de mediados de este año, la UE se compromete a proporcionar documentación y llevar a cabo seminarios de capacitación para las empresas de terceros países que deseen seguir comercializando en el mercado europeo.
Impulsando la Neutralidad de Carbono
El propósito fundamental del CBAM es sancionar la importación de bienes que excedan las emisiones de carbono permitidas para las empresas que operan en territorio europeo. Este enfoque tiene como objetivo primordial reducir las emisiones de gases de efecto invernadero y permitir a la UE alcanzar la neutralidad de carbono para mediados de siglo, un paso crucial en la lucha contra el cambio climático.
El Desafío para las Economías Emergentes
Esta medida presenta un desafío importante para los exportadores de países en desarrollo, ya que las empresas europeas no solo están sujetas a requisitos estrictos, sino que también cuentan con facilidades de financiamiento propias de economías centrales. China, India e Indonesia ya han expresado sus preocupaciones al respecto. Inicialmente, los importadores solo estarán obligados a informar sobre las compras y las emisiones de carbono correspondientes, sin incurrir en costos adicionales.
Argentina y su Perspectiva:
Cancillería en Argentina está gestionando esta situación, aunque aún no ha emitido un comunicado público al respecto. Dadas las características del comercio con la UE, no se anticipa un impacto inmediato de gran magnitud. Sin embargo, China e India, importantes proveedores de insumos para Europa, ya han presentado quejas ante la OMC.
El Funcionamiento del CBAM
La UE cuenta con uno de los mercados de carbono más rigurosos, compuesto por unas 10 mil empresas que representan el 40 por ciento de las emisiones totales en la región. Estas empresas reciben «derechos» de emisión de los países de la UE, los cuales disminuyen con el tiempo para impulsar la descarbonización. Si una empresa emite menos que su límite, puede vender el excedente en el mercado. En caso contrario, debe adquirir créditos de carbono.
El CBAM introduce un arancel que equipara los costos adicionales que enfrenta un productor europeo menos eficiente en términos de emisiones de carbono. Esta es la primera iniciativa que aplica una penalización a nivel transfronterizo a las emisiones de carbono en bienes.
Concretamente, la regulación obliga a los importadores europeos a adquirir certificados del CBAM para compensar la diferencia entre las emisiones producidas en el país de origen y las permitidas en la UE.
Perspectiva a Futuro
En su fase inicial, el Mecanismo cubrirá las importaciones de hierro, acero, cemento, aluminio, fertilizantes y electricidad. Posteriormente, se planea incluir otros tipos de bienes, como productos químicos. La meta es que para 2030, todos los bienes abarcados por el mercado de carbono en Europa estén sujetos al CBAM. Según la Comisión Europea, este sistema generará alrededor de 9 mil millones de euros anuales para el 2030.
Implementar este mecanismo sin considerar una modificación significativa en el financiamiento global para abordar el cambio climático, así como sin garantizar una adecuada transferencia tecnológica a los países en desarrollo y una redistribución equitativa de los costos, podría agravar las disparidades en un asunto de importancia global. Esta medida impone costos a las economías, particularmente a los países en desarrollo, lo que destaca la necesidad de una perspectiva equitativa en este desafío mundial.